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Las ventajas y beneficios de un campamento de verano para los niños (y los padres).
Si has ido alguna vez a un campamento de verano, casi seguro que viviste una experiencia inolvidable y recuerdas muchos grandes momentos.
El campamento es una experiencia diferente a las demás por todo lo que implica salir de casa y convivir con nuevas personas en un periodo de vacaciones, libre de los deberes diarios.
Existe una variada oferta que se adapta a todo tipo de gustos (campamentos de montaña, de playa, musicales, con idiomas etc.) para poder elegir. En este artículo hablamos de todas las claves para elegir un campamento de verano.
Índice de Contenidos
¿Que hace diferente y beneficioso a un campamento de verano?
Convivencia:
Al convivir varios días fuera de casa y salir del núcleo familiar, pasará a ser uno más del grupo.
Estará atendido perfectamente, aunque ahora comparte esa atención en igualdad de condiciones con otros de su edad y de otras edades. Ya no es el rey de la casa ni el centro de atención.
También lo hacen en el colegio, pero ahora la convivencia es de 24 horas. Es por ello que le da mucha intensidad a la experiencia.
No es raro ver a los niños/as llorar al despedirse al final del campamento puesto que las emociones son mayores que en otros formatos de convivencia. Casi con total seguridad, es una experiencia que no se olvida nunca.
En un grupo de iguales.
Va a tener que “negociar” con sus compañeros todo tipo de cosas casi todo el tiempo. Desde elegir la cama o la parte de la tienda hasta el juego al que se va a jugar.
Es decir, aprender a llegar a soluciones que sean satisfactorias para todos, a veces con la ayuda del monitor.
De la misma manera que en la escuela, es una especie de «laboratorio social» donde experimentar la difícil tarea de relacionarse, compartir, convivir, respetarse y dialogar.
Practicar habilidades sociales:
No hay otra forma de aprender habilidades sociales si no es practicándolas.
En los campamentos de verano no nos centramos en el rendimiento académico ni en el curriculum como en los viajes escolares, sino en fomentar la relación de grupo y la convivencia.
A través de las actividades grupales se establece un sentimiento de comunidad creando amistades intensas.
Se formularía una pregunta con doble perspectiva ¿Realmente se necesita estar preparado para un campamento de verano? o más bien, ¿Es el campamento una formula muy interesante de crecimiento personal?. En cualquier caso, cómo podría prepararse para ir a un campamento de verano es una guía rápida para favorecer la experiencia.
Con otros referentes
Ya no está papá y/o mamá como referencia. En cierto modo es como empezar de cero, pues no saben las triquiñuelas que se dan en el seno familiar para salirse con la suya.
Ahora en cambio, trata las 24 horas con otras personas que provienen de otras familias con otras formas de hacer las cosas y costumbres. Por tanto, tienen que adaptarse los unos a los otros.
En contacto con la naturaleza y el mundo rural.
Es bien sabido que los niños y niñas pasan mucho tiempo delante de las pantallas. Hoy en día las usamos para todo y ya no son solo como entrentenimiento sino para estudiar o trabajar. Existe de hecho un problema creciente de dependencias y adicciones a los dispositivos.
Sin duda, es necesario fomentar y volver al contacto con la naturaleza y a las relaciones personales fuera de las pantallas.
Los campamentos fomentan el movimiento, correr, trepar, jugar al aire libre. A través de las actividades y deportes se potencian la condición física, las experiencias sensoriales y vivencias enriquecedoras.
Autonomía personal y responsabilidad.
Va a tener que hacer cosas cotidianas que, por diversos factores, muchas veces no hace (hacer la cama, ayudar a recoger la mesa, recoger la habitación, organizar la maleta etc.).
Aunque tenga la ayuda del monitor/es, cada uno tiene que hacerse lo suyo. Al ser más autosuficientes desarrollan mayor confianza en sus habilidades y potencialidades.
Al mismo tiempo, debe gestionar su tiempo y su estancia. Requiere orden, puntualidad y aprender a organizarse para poder autorreguralse en cierta medida de tal forma que la intervención de los adultos es menor.
En un espacio de juego fuera de lo habitual.
Todo ello en un entorno amigable, cercano a la naturaleza y divertido en el que además se están haciendo todo tipo de actividades que normalmente no se hacen en casa.
Un campamento es un espacio independiente y protegido sin mayores obligaciones o normas que las que requieren el buen funcionamiento de un colectivo.
Dispondrá de parte del tiempo organizado en el que se realizan las actividades programadas, pero también tendra tiempo libre controlado, en el que se fomenta el juego libre.
Podrá fomentar el pensamiento creativo y la imaginación en un entorno más informal y menos encorsetado que otras actividades extraescolares.
Aprendizaje de nuevas habilidades y técnicas:
Uno de los beneficios de un campamento de verano es la metodología que se practica. Todo se realiza a través de la práctica y la participación. A través de talleres, juegos y manualidades se desarrollan destrezas y se aprenden nuevas habilidades que se pueden aplicar en la vida cotidiana.
¿Qué aprenden y practican los niños en los campamentos?
En consecuencia, las ventajas y beneficios de un campamento serían:
- Ser más tolerante, socializarse.
- Hacer nuevas amistades con las que comparte la habitación, juegos y actividades.
- Aprender nuevas formas de llenar el tiempo libre en relación con otros, sin depender tanto de la tecnología.
- Ganar autonomía y mejorar la “mamitis/papitis”.
- Colaborar y trabajar en equipo.
- Ayudar, participar, colaborar y crear.
- Ganar confianza en uno mismo.
Las 25 cosas que se aprenden en un campamento de verano
¿Y qué beneficios tiene un campamento para el resto de la familia?
Ver que tu hijo/a crece.
¿Puede haber algo más satisfactorio para toda la familia? ¡Cuidado! Qué va a ir creciendo rápidamente y sin darse cuenta ya no son niños.
Sin duda, se producen una serie de sentimientos encontrados que lo explica muy bien esta madre en su blog.
Hay dos opciones principales a la hora de educar a los hijos e hijas:
- Por un lado irles dotando paulatinamente de recursos para crecer a base de experiencias positivas para su desarrollo.
- Por otro lado se puede tratar de impedirlo y dejar que la naturaleza siga su curso. Posiblemente se encuentre mientras tanto con la adolescencia y a ver cómo se desenvuelve.
Mejorar en la sobreprotección y en la “hijitis”. Beneficio indirecto.
Confiar a los hijos a otras personas requiere una dosis de confianza y tranquilidad que también hay que practicar, sobre todo las primeras veces.
De la misma forma que existe la dependencia de los hijos, también existe la de los padres hacia ellos. También los miedos son libres.
Es más, la experiencia nos demuestra que muchas veces los padres y madres están más preocupados/as que los propios niños/as.
Éstos están jugando y haciendo cosas todo el día y aunque pueden llorar alguna vez al hablar por teléfono, están bien. De lo contrario, ya se habrían puesto los responsables en contacto.
No olvidemos que están en un campamento de verano y es un lujo, por desgracia, que no todo el mundo se puede permitir. En definitiva, no están ni en la cárcel ni en la guerra.
Un tiempo para la pareja.
¿Hace cuánto no se disfruta de unas vacaciones en pareja? De no tener vacaciones también supone un respiro en el día a día y permite hacer muchas cosas que seguro hace mucho tiempo que no se hacen.
!Cuidado¡ No se suele pensar cómo se va a rellenar el hueco que dejan los hijos/as al irse un tiempo fuera de casa. Y este es grande.
Probablemente haya cierta sensación de «nido vacío».
Ayudar a la conciliación familiar y tener a los hijos ocupados.
Probablemente es un motivo importante y habitual pero dado lo expuesto no debería ser el único.
Es cierto que en verano los niños están de vacaciones y es una buena forma de que estén haciendo actividades y se desarrollen. Mucho mejor que estar en casa con la consola o sin relacionarse por mucho que utilicemos todo tipo de juegos. Pero un campamento no es solo un lugar donde entretener niños, sino un espacio con gran potencial educativo.
Los beneficios de un campamento de verano y sus ventajas son amplios; es un regalo y un privilegio, no un castigo.
Siempre que se pueda permitir, es una experiencia muy enriquecedora que no se olvidará jamás.
Otros factores además de los beneficios de un campamento de verano.
Una vez vistas las ventajas y beneficios de un campamento de verano, habrá muchas dudas sin resolver.
En primer lugar puedes consultar el artículo “las claves para elegir el mejor campamento de verano” en el que damos las pistas para seleccionarlo.
En segundo lugar hemos hecho un recopilatorio intentando resolver todas las preguntas frecuentes que surgen al ir de campamento por primera vez.
Por último, ¿Cual es la mejor edad para ir de campamento?
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